Margara Bravo, una entrenadora de perros explicó a El Universal que siete elementos de seguridad llegaron a donde se encontraba junto con sus perros para exigirle que se retirara.
Además, agregó que no se le permitió el acceso a la estación Mixcoac a pesar de que el entrenamiento de los caninos consistía en aprender cómo brindar apoyo a las personas con discapacidad que requieran de su ayuda en el metro.
A pesar de que los caninos y sus entrenadores portaban chalecos y credenciales que los verificaban como parte de la Escuela de Entrenamiento para Perros de Asistencia OwenCare IAP, los oficiales no les permitieron ingresar.
La entrenadora dijo sentirse sorprendida porque aunque ya había tenido varios problemas en el Metro, nunca los habían tratado como si fueran delincuentes.
Por último, es importante explicar que la Ley de Protección Animal local permite que los perros de Asistencia en proceso de entrenamiento hagan uso del espacio público o privado para reforzar sus habilidades para las que fueron adiestrados.
