Nintendo ha emprendido acciones legales contra Tropic Haze, los creadores del emulador Yuzu, acusando al software de fomentar la piratería de sus juegos; la demanda, presentada el 27 de febrero, destaca la preocupación de Nintendo por la escala masiva de piratería que, según ellos, facilita Yuzu y que ocasionó en arruinar la experiencia de juego de sus clientes.
Tropic Haze ha respondido contratando servicios legales y tiene un plazo de 60 días para presentar su respuesta formal a las acusaciones; la demanda busca el cierre del emulador y una compensación por las pérdidas que Nintendo atribuye a la piratería.
La compañía nipona señala que su juego “The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom” fue pirateado más de un millón de veces la semana previa a su lanzamiento, alegando un aumento en las contribuciones a Patreon de Yuzu.
El conflicto plantea el eterno debate en la industria de los videojuegos sobre si la emulación es una herramienta para preservar títulos clásicos o simplemente un medio para fomentar la piratería.
La respuesta de Yuzu, por ahora, se centra en la recepción de la demanda y las acciones tomadas por Tropic Haze.
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Nintendo, conocida por su postura firme contra la emulación y cualquier forma de juego ilegal, ha enfrentado previamente casos legales exitosos; un ejemplo notorio es la condena de Gary Bowser, miembro del grupo Team-Xecuter, que desarrolló chips para modificar consolas como Nintendo 3DS y Nintendo Switch.
El escrito de respuesta de Yuzu establece un punto de partida en este enfrentamiento legal, y se espera ver si la batalla se libra en los tribunales o si ambas partes buscan un acuerdo extrajudicial, que deberá ser ratificado por la autoridad competente.