Revive la violencia en Colombia: Más de 100 muertos y miles de desplazados en cinco días

Diversos enfrentamientos entre el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y una disidencia de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en la región de Catatumbo han provocado una ola de violencia en el país sudamericano que durante los últimos cinco días ha cobrado la vida de más de cien personas y ha forzado a más 18 mil a desplazarse para escapar de la violencia. 

Las disputas entre ambas facciones tienen como motivo la lucha por el control de territorios y rutas clave del narcotráfico en el país que más produce cocaína en el mundo. El Catatumbo figura como un sector crucial para las FARC debido a que es considerada como un punto estratégico para el narcotráfico por su cercanía con Venezuela, debido a que permite que los grupos armados exporten cocaína. Según expertos, el ELN habría roto un acuerdo con las FARC para intentar obtener el control regional de El Catacumbo.

Apenas el lunes pasado, el Ministerio de Defensa informó sobre la muerte de 20 personas en el departamento amazónico del Guaviare (sur) por choques entre dos facciones enemigas de las disidencias de las FARC. La violencia se ha extendido a los municipios de Ábrego, Convención, El Carmen, El Tarra, Hacarí, La Plata, San Calixto, Sardinata, Teorama y Tibú.

El gobernador de Norte de Santander, William Villamizar detalló que a los heridos les “ha tocado sacarlas de la región por vía áerea para poder salvar su vida” en medio de un conflicto que inició el jueves pasado, el cual también ha provocado el éxodo de miles de campesinos hacia Cúcuta, Ocaña y la misma Tibú. Más de 45 mil niños no han podido arrancar su año escolar en El Catatumbo como consecuencia de las hostilidades en la región, según reportó el martes la Procuraduría General.

Muchas de las familias desplazadas se están refugiando en un estadio de Cúcuta, ciudad fronteriza más conocida en los últimos años por acoger a migrantes venezolanos.

Te podría interesar: Marina neutraliza dos narcolabotarios clandestinos a las afueras de Culiacán, Sinaloa

Por su parte, el presidente Gustavo declaró estado de conmoción interior y emergencia económica por la ofensiva del ELN:

Se declara el estado de conmoción interior y el estado de emergencia económica. Espero del poder judicial su apoyo”. Además, advirtió al ELN que “la revolución solo se puede hacer con el pueblo y sin violencia”.

El Estado de Conmoción permite que el presidente tome decisiones drásticas para restaurar la seguridad y la normalidad cuando las atribuciones ordinarias de las autoridades no son suficientes. Por otro lado, el estado de emergencia económica le permitirá destinar de manera rápida recursos financieros para a región.

Por si fuera poco, la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos informó que al menos dos defensores de derechos humanos fueron asesinados en la reciente escalada de violencia en el noreste de Colombia.

Violencia en Colombia rompe acuerdo histórico

La situación de violencia que vive Colombia marca un distanciamiento mayúsculo respecto al acuerdo de paz que el gobierno firmó con las FARC hace menos de una década, en 2016.

Previo al acuerdo, Colombia vivió décadas de violencia desenfrenada por conflictos internos entre grupos guerrilleros de izquierda, incluidas las FARC, organizaciones paramilitares y el mismo gobierno, quienes lucharon por el control del país y por industrias lucrativas como el narcotráfico.

Tras el acuerdo, miles de combatientes de las FARC bajaron las armas en 2016, y en ese entonces pareció un momento de cambio radical para uno de los países más violentos del mundo. Pero antiguos grupos rebeldes, como el Ejército de Liberación Nacional (ELN), persistieron y surgieron grupos nuevos; todos ellos lucharon por el control del territorio y la industria que dejaron las FARC.

En algunos casos, estos nuevos grupos están formados por antiguos combatientes de las FARC, y se han dividido y subdividido, contribuyendo a alimentar un conflicto cada vez más complicado.

 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *