La estudiante de derecho Anaya Peterson, de 32 años, originaria de Irlanda del Norte, fue hospitalizada después de la alteración que sufrió su ojo y enfrentó ceguera permanente después de una supuesta reacción a la tinta del tatuaje que tuvo su globo ocular.
Peterson tomó inspiración de la modela australiana Amber Luke, también conocida como el ‘dragón de ojos azules‘, quien quedó ciega durante tres semanas después de teñirse los ojos de azul en 2019.
La madre de cinco hijos se tatuó el globo ocular derecho de azul en julio de 2020 y, a pesar de lidiar con dolores de cabeza y ojos secos como parte del proceso de curación, optó por teñirse el ojo izquierdo de púrpura más tarde ese año.
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Después de meses sin complicaciones, Anaya se despertó en agosto de 2021 y descubrió que sus párpados parecían hinchados como si su “cara hubiera sido inflada con aire“.
“Mi párpado [superior] comenzó a hincharse y mi párpado inferior comenzó a hincharse. Siguió empeorando y empeorando. Parecía que había hecho diez rondas con Mike Tyson […] “Tomé la opción de ir [al hospital] yo mismo. Me operaron y tomaron muestras de mi ojo”, comentó.
A medida que la hinchazón empeoró, Anaya se registró en la sala de urgencias del hospital, después de que los antibióticos recetados no hicieran nada para reducir la “inflamación severa“.
La entusiasta del tatuaje recibió medicamentos a través de un goteo durante tres días, antes de que se le realizara una biopsia en su globo ocular problemático al día siguiente.
Anaya afirma que su hija India, de siete años, nunca estuvo “de acuerdo” con el tatuaje, ya que temía que su madre “se quedara ciega“.
Aunque ya fue dada de alta del hospital como parte de su ‘recuperación’, la terrible experiencia la ha dejado lamentando su elección de seguir los pasos de la modelo australiana.
Además, los oftalmólogos le han dicho que ahora tiene un riesgo muy alto de contraer glaucoma y que su vista ya está empeorando.
