De acuerdo con la consultora global Kearney, México presentó una caída de 4 puestos dentro del índice global de inversión extranjera. Con esta caída, el país se ubica en el último lugar de los 25 países más confiables para el capital extranjero, esto a causa de las posibles consecuencias que traerán consigo los nuevos aranceles interpuestos por Estados Unidos.
“En los top 25, salieron Argentina y Polonia. Y México, con todo y lo que está sucediendo, con la incertidumbre que se veía venir desde el año pasado, se ubicó en el lugar 25″, expuso Omar Troncoso, Director General de Kearney México.
Además, Troncoso detalló que, aunque el Gobierno Federal reportó una recolección de 36 mil 872 millones de dólares en IED, este monto se debe más a la reinversión de empresas manufactureras que se encuentran en el país.
México mantiene su posición en economías emergentes
En cuanto a economías emergentes, la consultora Kearney apunta que México se mantuvo en la posición 6, puesto que tiene desde 2024. En este apartado, el país que más cayó fue Argentina, pues en 2024 se ubicaba en la posición ocho y en este año no entró en el top ten.
A nivel regional las zonas con más mercados emergentes son:
- América, con 8
- Asia – Pacífico, con 7
- Medio Oriente y África, con cinco
- Europa, con cinco
Respecto a los países más atractivos para invertir son Estados Unidos, Canadá y Reino Unido.
Ventajas económicas de México continúan
Para Troncoso, la caída de México en el Índice de Inversión Extranjera no debería ser una preocupación para el gobierno nacional, pues las ventajas económicas aún siguen.
Entre ellas, destaca las siguientes:
- Costo de la mano de obra
- Volumen del mercado interno
- Disponibilidad de materias primas
- Acceso al mercado estadounidense
Sin embargo, dijo que la inversión actualmente está concentrada en la manufactura, que pasó de abarcar el 41 por ciento en el anterior reporte al 51 por ciento en el actual.
Troncoso señaló que el actual momento álgido global por el anuncio de Estados Unidos de aranceles recíprocos a gran parte del mundo podría significar un “freno” para las inversiones destinadas a México.
Pese a todo, Troncoso señaló que México sigue siendo atractivo especialmente para empresas de América que buscan reinvertir o ampliarse en el país.
“Yo creo que la reacción en general es positiva. Yo creo que México pudiera mantener su estatus de competitividad entre la mano de obra y entre la devaluación del peso, y especialmente en los sectores de bienes de consumo, productos para cuidar la salud y autopartes”, enfatizó.