Kemi Badenoch venció a Robert Jenrick en las primarias del Partido Conservador británico y se convirtió en la primera mujer negra en liderar la formación. Con 44 años, la política londinense es hija de inmigrantes nigerianos, pero sus orígenes no le impiden mantener duras posturas contra la inmigración irregular.
Elegida con 54,000 votos de los afiliados, contra 41,000 de su rival, el ascenso de Badenoch confirma que el ala más dura de los Conservadores sigue al mando del partido. Su antecesor, Rishi Sunak, reforzó el discurso antiinmigración de la formación, impulsando deportaciones a Ruanda y la construcción de una prisión flotante para migrantes. Antes que él, Liz Truss, Boris Johnson y Theresa May también empujaron al partido hacia la derecha. Todo esto con el contexto del Brexit, un fenómeno antiinmigrante en el fondo.
Además de mantener una postura contra la migración, Badenoch también se presenta como una fuerza de contención contra las llamadas guerras culturales de izquierda. Esto significa que la nueva líder opositora está en contra de las políticas relacionadas con la identidad de género o el movimiento trans. En lo general, Badenoch rechaza el multiculturalismo del presente. Algunas de sus propuestas pretenden deportar a todos los migrantes que tengan una condena por crimen y priorizar los apoyos sociales para connacionales, en materia de vivienda o escolarización.
Badenoch, ante el reto de levantar a la oposición
Badenoch asume las riendas del la oposición británica en un momento de horas bajas para el Partido Conservador. El pasado 4 de julio, la formación sufrió una estrepitosa derrota ante el Partido Laborista en las elecciones generales de Reino Unido. La victoria del candidato izquierdista Keir Starmer terminó con 14 años de gobiernos de derecha, desde que David Cameron asumiera el cargo en 2010.
Más allá de perder la mayoría en el Parlamento, que es la llave para entrar a Downing Street, el Partido Conservador se desplomó en votos. La formación llegó a los comicios con 344 asientos en el Parlamento y salió de la elección con solo 121, una pérdida de 251 escaños. Los Laboristas, por el contrario, elevaron su presencia en Westminster de 205 a 411. Y el centrista Partido Liberal, el eterno tercer lugar, escaló de 15 a 72.
Esta derrota anunció la eventual caída de Rishi Sunak al frente de los Conservadores. El partido se tomó el relevo con calma y cuatro meses después, Badenoch se ha alzado como la sucesora. Además de llegar con un discurso duro contra la inmigración, la ex parlamentaria convenció a sus adeptos con autocrítica hacia el partido. “Para ser escuchados, primero tenemos que ser honestos. Honestos ante la realidad de que hemos cometido errores. Honestos ante el hecho de que hemos permitido que nuestros estándares bajarán”, espetó la nueva líder conservadora en su discurso vencedor.
Más información relevante aquí.