Carolina Muñoz Kennedy, una reconocida paracaidista chilena de 40 años, perdió la vida en Brasil al fallar sus dos paracaídas durante un salto. El accidente ocurrió mientras realizaba un entrenamiento en la localidad de Boituva, cuando su paracaídas principal se rompió en pleno descenso.
Un video del incidente muestra cómo la experimentada paracaidista cae a una velocidad inusualmente rápida, dando vueltas en el aire. Aunque Carolina intentó estabilizar el paracaídas, finalmente impactó contra el pavimento en una calle. La policía ha clasificado su fallecimiento como “sospechoso/accidental”.
Patricio Chandía, presidente de la Federación Chilena de Paracaidismo (Parafech), compartió en una entrevista con Las Últimas Noticias que, según el presidente de la Federación Brasileña de Paracaidismo, Wellington Mendes, tanto el paracaídas principal como el de reserva fallaron, precipitando a Carolina hacia el suelo. Mendes resaltó que llevaban 10 años sin un accidente de esta magnitud.
Carolina Muñoz a poco tiempo del retiro
Su amiga, Carol Schrappe, reveló que Carolina había considerado retirarse del paracaidismo tras perder a algunos amigos cercanos en accidentes similares. Carolina estaba en proceso de transición hacia el buceo libre y planeaba dejar el paracaidismo gradualmente, sin abandonar por completo la actividad que tanto disfrutaba. Conocía bien los riesgos, pero, desafortunadamente, no tuvo tiempo para realizar esa transición.
Descanse en paz.
Acerca del paracaidismo
El paracaidismo tiene sus raíces en la antigua China, donde se utilizaban dispositivos de aterrizaje suave, como sombrillas, para amortiguar caídas desde alturas moderadas. Sin embargo, fue en el Renacimiento cuando se comenzó a conceptualizar de manera más avanzada. En 1485, Leonardo da Vinci diseñó un boceto de un paracaídas piramidal, aunque nunca llegó a construirlo.
La primera hazaña registrada con un paracaídas ocurrió en 1797, cuando el francés André-Jacques Garnerin saltó desde un globo aerostático a 1,000 metros de altura sobre París usando un paracaídas de seda, marcando el inicio de este deporte. En el siglo XX, el paracaidismo evolucionó como una herramienta militar durante ambas guerras mundiales, y, más tarde, comenzó a practicarse de manera recreativa.
Actualmente, el paracaidismo es tanto un deporte extremo como una disciplina competitiva y artística, en la que los participantes realizan acrobacias y saltos desde aviones a grandes alturas.
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