Avión con 64 pasajeros se estrella con helicóptero militar en Washington D.C.

Durante la noche pasado miércoles, un avión de American Airlines con 60 pasajeros y cuatro tripulantes a bordo, chocó durante la noche del miércoles con un helicóptero Blackhawk del Ejército, con tres soldados, cuando estaba a punto de aterrizar en el Aeropuerto Nacional Ronald Reagan, cercano a la capital estadounidense en Washington D.C. Ambas aeronaves cayeron sobre el río Potomac, lo que desató una gran operación de búsqueda y rescate.

Las autoridades han dicho que no se esperan sobrevivientes del vuelo n.º 5342 de American Eagle, que viajaba desde Wichita, Kansas, a la capital estadounidense. American Eagle y PSA Airlines son subsidiarias de American Airlines.

John Donnelly, jefe de bomberos y servicios médicos de emergencia del Distrito de Columbia, declaró que no se esperan sobrevivientes del vuelo n.º 5342 de American Eagle, que viajaba desde Wichita, Kansas, a la capital estadounidense. American Eagle y PSA Airlines son subsidiarias de American Airlines.

Además, aseguró que se han recuperado 27 cuerpos del avión y uno del helicóptero. Donnelly también aseguró que los trabajos de búsqueda han pasado de ser una operación de rescate a una operación de recuperación.

Por su parte, la alcaldesa del Distrito de Columbia, Muriel Bowser, declaró que iban “recuperar a nuestros conciudadanos”, durante una conferencia de prensa en donde no reveló el número de cuerpos que habían recuperado.

Entre los pasajeros del vuelo se encontraba un grupo de patinadores artísticos, sus entrenadores y familiares que regresaban de un campamento de desarrollo que siguió al Campeonato de Patinaje Artístico de Estados Unidos en Wichita.

Estamos devastados por esta indescriptible tragedia y llevamos a las familias de las víctimas en nuestros corazones”, dijo US Figure Skating en un comunicado.

El presidente Donald Trump declaró que había sido “plenamente informado sobre este terrible accidente” y dijo “Que Dios bendiga sus almas”, refiriéndose a los pasajeros que perdieron la vida.

Posteriormente, cuestionó lo sucedido en una publicación de Truth Social y escribió: “Esta es una mala situación que parece que debería haberse evitado. ¡NO ES BUENO!”.

Por su parte, el secretario de Defensa, Pete Hegseth, calificó la colisión como una “pérdida horrible de vidas” y aunque no reveló la identidad de los soldados a bordo, aseguró que eran pilotos muy experimentados, que estaban usando lentes de visión de nocturna y que estaban investigando las causas del accidente:

“La unidad del ejército involucrada pertenecía a la Compañía Bravo, 12.º Batallón de Aviación en Fort Belvoir. Se trataba de un vuelo de entrenamiento anual de competencia”.

Por nuestra parte, sabemos quién estuvo involucrado. Era una tripulación con bastante experiencia y estaba realizando la evaluación nocturna anual obligatoria. Tenían gafas de visión nocturna”, continuó el secretario de Defensa, añadiendo que el departamento está investigando activamente el accidente.

Los aviones militares realizan con frecuencia vuelos de entrenamiento en el espacio aéreo congestionado y muy restringido que rodea la capital del país, para familiarizarse y dar continuidad a la planificación gubernamental.

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Esto es lo que se sabe de la colisión del avión en Washington

Según el recuento elaborado por investigadores, que todavía trabajan para averiguar qué fue exactamente lo que pasó, el vuelo 5342 de American Airlines se dirigía al aeropuerto Reagan National a una altitud de unos 121 metros y una velocidad de unos 225 kilómetros por hora cuando sufrió una rápida pérdida de altitud sobre el río Potomac, según los datos de su transpondedor de radio. El avión bimotor CRJ-701 de fabricación canadiense, fabricado en 2004, puede transportar hasta 70 pasajeros.

Unos minutos antes de aterrizar, los controladores aéreos preguntaron al avión comercial que llegaba si podía aterrizar en la pista 33, la más corta del aeropuerto Reagan National, y los pilotos respondieron que sí. Los controladores autorizaron entonces al avión a aterrizar en la pista 33. Los sitios de seguimiento de vuelo mostraron que el avión ajustó su aproximación a la nueva pista.

Menos de 30 segundos antes del accidente, un controlador de tráfico aéreo preguntó al helicóptero si tenía a la vista el avión que llegaba. El controlador hizo otra llamada por radio al helicóptero momentos después: “PAT 25 pasa por detrás del CRJ”. Segundos después, los dos aviones colisionaron.

El transpondedor de radio del avión dejó de transmitir a unos 2,400 pies de la pista, aproximadamente sobre el medio del río. El avión de pasajeros se rompió en varios pedazos y se hundió varios metros en el río, mientras que el helicóptero terminó boca abajo en el agua, según los informes.

Es el primer gran accidente aéreo comercial en Estados Unidos desde hace casi 16 años

El último gran accidente aéreo comercial en Estados Unidos se produjo en febrero de 2009, cuando un vuelo de Continental Airlines que partía de Newark (Nueva Jersey) y operado por Colgan Air se estrelló contra una casa cuando se aproximaba al aeropuerto de Buffalo (Nueva York). El avión era un Bombardier Q400. En la tragedia murieron 49 personas. Continental se fusionó con United Airlines en 2010. 

En lo que respecta a American Airlines, su último accidente trágico ocurrió en noviembre de 2001 cerca del Aeropuerto Internacional John F. Kennedy, apenas dos meses después del 9/11. El vuelo n.º 587 de American Airlines, un Airbus A300, se estrelló poco después del despegue y murieron 265 personas. Se dirigía a Santo Domingo, en la República Dominicana. El avión se estrelló en la zona de Belle Harbor de los Rockaways, en el distrito neoyorquino de Queens.

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